LOS ANIMALES TIENEN ALMA

No creo en el Dios de los humanos tal como lo transmiten las religiones cristianas, porque no es así, yo que conozco a Dios, se como es.

Os explicaré una experiencia vivida, algo que también tiene que ver con el antes y el después, con esa corresponsabilidad en el tiempo de las almas. Las almas son emociones, son nuestras vivencias expresadas en el tiempo.


Mi hija me deja muchas veces su perro, a quien aprecio mucho, para que lo cuide. Muchas veces he notado en mi casa pasos , ligeros,no tan ligeros, cuando no hay nadie, puertas que se abren, interruptores que se cierran...bueno, a eso hace años que no hago caso, quiero decir, que yo puedo notar a alguien que baja una escalera a mi lado y preguntar distraidamente
¡Quién hay???, y si nadie me contesta. Me quedo tan fresca. Es parte de mi vida y mis experiencias.

Lo que nunca había notado era el corretear de los piececitos de un perro. En la casa que vivo hace muchos años que no tenemos perro, solo cuando me dejan algunos días el de mi hija, y es un perro de tamaño mediano, sube las escaleras al trote, de una manera muy característica.

Un día estaba yo escribiendo unas paginitas en el despachito, enla planta cinco de la casa y escuché justo al lado, en las escaleras, el típico trote de perro bajando y subiendo simpáticamente, mi mente por un momento se llenó con el nombre del perro d emi hija:
-Buzz. Vina!!!

Sin darme cuenta estaba llamando al perro de mi hija. Toda convencida que era él el que bajaba y subía rápido a menos de dos metros de mi despacho las escaleras. Pero NO!!!, cuando me puse a reflexionar un instante:
-TATE!!!, si hoy no tengo el perro de mi hija en casa.

Bueno, no hice caso, y aún escuché tres o cuatro veces más, los piececitos subir y bajar. A veces oigo pasos de niño, pero esta vez estaba convencida que era un animal pequeño tipo perro, demasiado pesado para ser un gato. Un perro que no subía las escaleras como Buzz, el cocker de mi hija, si no de una manera más ligera, más liviana.
Bueno, no le di más vueltas.

Esto ocurrió hace unos meses, medio año quizás.

Hace un mes mi hijo me pidió para reyes un perrillo, y nos fuimos a la tienda a buscar una pequeña westy de medio año.
La westy se ha convertido en la reina de casa, en mi sombra, la verdad es que le he cogido mucho cariño porque es asombrosamente inteligente y cariñosa, como todos los perrillos.

El otro día estaba en mi despacho con la mente vacia, en un estado pre catatónico, con una taza de café en las manos...y tate:

-El fantasma del perro!!!!

Aquel ruido era exactamente el que había escuchado hacía seis meses, en esas mismas escaleras...un deja vu brutal. Claro, pero esta vez eran los piececitos de NEU la westy.

Vaya!!!!hace seis meses estabas aquí mismo - pensé - sentada, viéndote dentro de seis meses, hasta creo recordar que en algún momento una memoria olfativa de café te llegó al cerebro y luego bajaste a poner la cafetera.

Las brujas tenemos esas cosas, vivimos el antes y el después de una manera endiabladamente complicada!!!, no es que vivamos entre fantasmas, es que nosotras mismas somos el fantasma-.