EL CAPITALISMO AMENAZANTE (Y AMENAZADO) o la prisión de oro

Vaya y que si!!!
estamos viviendo, en una fea PRISION DE ORO, que es este capitalismo tecnológico amenazante (Ojo!Y amenazado, que hace más aguas que un molino arrastrando el agua del riachuelo). PRISION FEA DONDE LAS HAYA.
Los grandes capitalistas y sus secuaces los políticos, se han empeñado en que continuemos rr con rr, porque de ello depende su bienestar y supervivencia como colectivos, pero deberíamos abrir los ojos:
Nunca ha habido en una sociedad MENOS LIBERTAD.

Lo tenemos prohibido básicamente todo, cuando ven que el CONTROL se les escapa por algún agujero, elaboran otra ley.
Nos dicen cómo tenemos que educar a los niños (Así nos va), cómo debemos ser los padres, nos ponen normas a las parejas, reglamentan la convivencia (Más que los propios credos religiosos), como debemos gastar el dienro y de que manera, hacienda nos controla, las tecnologías nos controlan, los jefes espían a sus empleados a través de los móviles, los jefes son espiados por otros jefes, los poderosos saben de nosotros gracias a los satélites y a otros artilugios, internet, la informática, hace que no podamos dar un paso sin que todo quede fichado, entramos en una tienda y vamos por la calle, y una cámara graba nuestras imágenes que luego se depositan en ficheros informáticos, en bases de datos...No podemos beber, nos ponen límites a la bebeida, a la conducción, a la vida, y pronto al deseo, les dicen a los crios cuando dejan de ser crios por ley...permiten o despermiten casar a éstos y a aquellos...
en fin, no "cagamos" sin que alguien sepa que lo hacemos.

Me da la sensación que estamos más vigilados (Y por tanto stressados y paranoicos, damos vidilla a los psiquiatras y a los psicólogos), que los habitantes de hace un siglo en los pueblos, cuando las chafarderas asomaban a los balcones para saber de la vida diaria de todo el mundo.

Nosotros mismos hemos caido en la trampa, cada vez que damos un paso firmamos un papelito, o introducen nuestros datos en internet, u ofrecemos nuestra vida privada a las compañías de telecomunicaciones, en fin, que somos los herederos de la NO CONFIDENCIALIDAD.

El hombre por el respeto al hombre ha muerto. Somos números, elementos del sistema, globalización, y quizás nuestros hijos como no lo cambiemos, serán esclavos , porque eso es ESCLAVITUD, se mire por donde se mire, del gran sistema capitalista, que solo hace libres a unos individuos privilegiados que tienen poder para controlar la información y su uso.