LA ABEJITA Y LA ORACION

Señor, señor: qué hoy lunes me levante optimista!!!, con mucha energía, vital, qué sepa llevar a cabo mis tareas sin quejarme!!!!, que el cuerpo me funcione...etc etc etc.

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La verdad es que me he levantado fatal, como el día, con esas pesadas nubes que distorsionan el azul intenso, la luz, el sol, del verano. Se acerca una tormenta estival.
He subido a primerísima hora a la terraza, a recoger una ropa del tenderero, "humanos somos", no sea que se ponga a diluviar...bien, una abejita (ABEJORRA), que también se ha levantado enfadadísima como el día, ha venido directo hacia mi, en un instante se ha posado en mi antebrazo y me ha hincado el aguijón......ÑACA ÑACA!!!

El brazo como un pastel de nata enrojecido...

Pero sin duda esa abejita era un mensaje de "ARRIBA", porque en un instante, en un segundo, el ánimo se ha levantado, me he despertado del todo, me he puesto las pilas, me he cabreado, me he descabreado, y bueno....en fin, gracias señor, todos deberíamos tener en nnuestras vidas una abejorra-abejita cojonera que nos picara a primera hora de mañana de un lunes de verano pasado por aguaceros, para recordarnos que en esta vida, todo es imprevisible, el aburrimiento es casi un pecado, y la desgana, la desidia, la falta de moral, de ánimo, como decía mi abuela, el nuevo mal de los afortunados, de los ricos...

teniendo en cuenta de que ricos no somos, aunque comparados con las sociedades más pobres, debemos ser considerados en el "cielo" como unos afortunadísimos herederos, y que nuestras vidas son cómodas, mi abuela debía llevar algo de razón.

Vamos, abuela, que te veo venir, te has disfrazado de "abejita" y te has comido un -peasso- de mi brazo, entre tú y Dios, me habeis levantado como quien dice de la cama.