EL SEXO Y LA CRISIS - SOCIOLOGIA DE LA CRISIS

Hoy tenemos una inspección rutinaria de sanidad en la bodega.
Normalmente pasamos dos o tres inspecciones al año, sanidad, agricultura, industria etc
Este fin de mes me llegan 4000 cepas, hay que plantar.
Estoy ultimando algo que se llama : trazabilidad de proveedores, para entregar al inspector.
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Bueno, pasada esta primera revisión y hoja de ruta de trabajo del día, NO me sorprende esta noticia del yahoo:
http://es.noticias.yahoo.com/9/20090115/tso-el-sexo-se-vuelve-mas-conservador-en-5bc9ac5.html
El mundo ha soportado crisis económicas y sociales suficientes para saber como nos comportamos habitualmente ante ellas, no hace falta ser bruja/o para hacer este tipo de aseveraciones, somos como somos, y solemos comportarnos siempre de manera parecida, de hecho todos los hombres podemos caber en unas cuantas categorías, y eso de que somos tan distintos es una falacia, no somos tan distintos.
Sexualmente nos reprimimos delante de las adversidades, es una respuesta psicológica y tb una respuesta fisiológica y natural, que se desliza desde nuestro pensamiento más animal hacia la superficie del raciocinio. Es una respuesta animal que tiende a preservar la especie, evitando los embarazos en momentos de hambruna, de crisis, de contención.
No somos tan dueños de nuestros actos, ni siquiera de nuestros pensamientos, y menos de nuestros estímulos. Ayer hablábamos de libertad. Bien, no gozamos ni de un mísero tanto por ciento de ridícula libertad.
Estamos controlados por estímulos exteriores, muchos mensajes subliminales, pero tb por mensajes subliminales y estímulos de nuestro mundo interior.
El sexo ante las crisis, se contiene, y se contiene de manera moral, adoctrinamientos, ahora saldrán las voces más fuertes en contra de las relaciones humanas menos convencionales, y es normal, ellos no lo saben, pero están dominados por sus miedos subliminales a que haya más nacimientos de los que la crisis puede soportar.
En épocas de guerras y pre-guerras, en España, las abortadoras no profesionales, se hicieron de oro. Yo tengo un amigo cuya abuela se desembarazó de gemelos en la época de finales de la guerra, y tuvo que hacer cola un mes, para que la atendiera una abortadora de las de entonces.
Estaba espantada su abuela, porque cuando aborto - ella no sabía que llevaba gemelos - tenía ya una buena barriga, y algunas vecinas le habían ya preguntado si estaba "preñada". La abuela de mi amiga estaba casada y tenía hijos. La situación era tan catastrófica y las preñadas acudían a las abortadoras como churros. Eso no sale en las películas y seguramente las doctrinas católicas no lo querían reconocer, pero todas estas mujeres eran católicas, de clases medias, incluso, la situación las hábía puesto en un brete. Pero eso también es história, eso son situaciones típicas de los momentos de hambruna, los métodos modernos anti- conceptivos son de hace cuatro días.

Por eso, ante esa serie de estímulos que parten incluso de nuestros miedos ancestrales, y nuestro deseo instintivo de supervivencia, la moral se recrudece a la par que merma la calidad social y económica. Seguramente se adoctrina desde arriba - los más ricos temen perder sus privilegios si se dispara la natalidad (Los mensajes subliminales) - y los más pobres y con menos capacidad intelectual, son los que se convierten en estandartes de esta moral desvirtuada e irracional, que no admite tolerancia alguna, hacia las formas que ellos entienden como desmadradas de sexualidad. La sexualidad es más natural cuanto más sana. Normalmente, los que tienen más fantasías sexuales inaceptables, son los que reniegan más de su sexualidad. Yo cuando veo los grandes moralizadores , pienso : UMMMM ¿Qué tendrás tú en la cabeza cuando copulas?, o bien ¿Qué escondes?.

Dime de que presumes y te diré de que careces...todos los grandes dichos se basan en algunas realidades fundamentales, en sexualidad, podríamos decir:
-Dime que criticas y te diré de qué tienes miedo. Pero miedo, porque no sabes si controlarás tus estímulos.
Normalmente la homosexualidad entre hombres ha sido algo inaceptable, pero sobretodo en las sociedades más modernas y entre los propios hombres, precisamente porque las tendencias homosexuales entre los hombres son muy profundas. Ellos sonrien, hacen bromas, etc, pero bueno, ojalá hubiera una máquina del pensamiento que pudiera recalar en esos hombres que se manifiestan como grandes contrarios a la homosexualidad. Solo hay que ver la posición dura de la iglesia católica contra los homosexuales , y lo que la propia historia de la iglesia y las anécdotas que todos sabemos y conocemos, nos cuenta de las relaciones sexuales de los propios sacerdotes, incluso de la pederastia y el catolicismo, tan de la mano.

La intolerancia en el sexo, es siempre - tal y cuando hablemos de posturas que no afectan a la libertad de todos los componentes de una relación sexual - siempre signo de visceralidad. Es decir, de miedo contenido. De ir contra la propia naturaleza de uno. Uno se siente sucio por sus propios actos, o pensamientos, o ambos, y se convierte en censor.
El hombre puro no existe, la sexualidad es un estímulo tan incontrolabre como los esfínteres.
Y un exceso de control, comporta el desbordamiento de las "masas", es decir, el hambre no provoca contención, si no que provoca gula. Quienes han pasado por épocas de hambre, y luego pasan a vivir mejor, se convierte en personas dadas a la gula, si se les permite. Tengo una pariente que pasó mucha hambre durante la guerra, cuya obsesión toda la vida ha sido la comida, no es que coma en demasía, pero le aterra tener los estantes vacios. Vas a su casa y atesora comida, la neveras - neveras - a rebosar, casi da risa, porque piensas que es imposible que una persona de su edad pueda comer ni en cien años tanta comida. Es su miedo al hambre, su miedo a no tener comida. Si subconsciente le está jugando malas pasadas.
En el sexo ocurre lo mismo, un exceso de hambruna, revierte en un deseo insconciente- que a la vez deben reprimir y un exceso de represión produce rabia, desencadena agresividad. La agresividad y la contención sexual tb van unidas, y cuando por cuestiones morales, educacionales o socio - éticas, la hambruna y la agresividad y la sexualidad contenida de juntan, entre ellas se retro-alimentan y acaban llevando a las sociedades a una necesidad de auto-conservación, auto- preservación (Las estanterías siempre llenas por si acaso), que los convierten en máquinas de guerra. Las guerras y las cuestiones sociales se alimentan en si mismas.