LOS TOROS

¿QUIÉN NO HA SIDO JOVEN ALGUNA VEZ?,
No soy mucho de espantar a los animales, más bien me gusta tratarlos bien y curarlos, cúantos perros- por los menos tres o cuatro!!!!- he curado de parvovirus, es mi especialidad, eso si, paciencia, y no tener pizca sueño, dos cosas que se me dan bien. Puedo pasar la noche al lado de un perro enfermo, moribundo, inyectándole intra-muscular primperan, suero, antibiótico, en caso de parvovirus, o haciéndole beber clara de huevo, e inyectándole anticoagulante, en casa de veneno...lo he hecho varias veces. Me duele ver morir a los animales, en casa tenemos dos gatas, una va por los 16 años, y nunca ha estado enferma en la vida, ahora da mucho la lata, está ciega y pienso que se le ha ido "la cabeza" como a los abuelos, mi marido me ha comentado alguna vez de darle un final rápido y austero, pero yo me niego, la gata es feliz en casa, se conoce los rincones de memoría, sabe donde ponerse a dormir, duerme casi todo el día, y a mi no me importa, o si que me importa, me resta tiempo, pero es mi deber, ha sido nuestra amiga 16 años, mientras no sufra por el dolor de una enfermedad, no quiero que se vaya, y aunque vieja, ciega y algo loca, parece sana.

Bien, a lo que íbamos, durante la juventud fuí a cazar con mi marido alguna vez, pero le hacía errar los tiros, hasta que se hartó, y dejamos de ir, a mi no me gusta ver sufir nada, me da mucho espanto, el sufrimiento es la crueldad hecha realidad.

Lo de los toros a mi personalmente no me gusta, de joven iba a las discotecas, eso si que me gustaba, y veo que a mi hija le gusta ese ambiente, el de los San Fermines, bien, este año le he dicho: Vete, pásatelo bien, y vigila con el toro y vigila con el vino!!!!o con la cerveza!!!

Y como era de preveer, va y se envalentonan, y uno de sus amigos se ha caido al suelo, con avalancha, y el toro les ha pasado por encima...todo un señor susto, con visita al hospital incluida.

La verdad es que Selección Ingrid es así, así era el vino, así es ella.
Algún día haré un psiconálisis de nuestros vinos, los vinos, como las personas, tienen una personalidad propia - si la tienen, esa es otra, quizás hoy hay vinos mediocres, resultones, pero sin verdadera personalidad- pero vamos, procuramos que los que salen de esta casa, de esta factura, sean como esa juventud delante del toro, valientes, distintos, un poco románticos, diez puntos robustos y fuertes, vamos, de los que les pasa el toro por encima, y salen del hospital con un leve dolor en el omoplato...

A vuestra salud chicos!!!