La camarera

La camarera no quería abortar....
Parece ser que el dueño del bar quería que abortase a cambio de no despedirla, o algo por el estilo.Estas noticias cazadas al vuelo, en el coche, a veces se hacen difusas.
Por supuesto, la camarera ha continuado con su embarazo y tras el despido, se ha buscado quien la defienda.

Esta noticia que suena a España de repiques de campana y el alirón, de siglos pretéritos y otras historias, que incluso sería comprensible que no justificable, en el ambiente salado y rancio de un bareto cualquiera y un pequeño empresario golpeado por las deudas, la hacienda y los bancos...resulta que se ha dado, deformada en otras empresas, con más abolengo, menos rancio y menos all-i-oli con mosca.

Y digo yo, que hace ocho años viví una cosa parecida, cuando un jefe de zona de una empresa financiera, que por cierto, continua siendo jefe de zona, me puse entre la espada y la pared, y me hizo elegir entre la adopción de mi tercer hijo o un cargo, semi-cargo, que me acababan de dar en una oficinita perdida allá en la montaña. Por supuesto, el cargo era de poca importancia y me quedé con Andreu,y por muchísimos años, y mandé al jefecillo a hacer puñetas. A mi me salió regular la historia, tampoco mal,de hecho muy muy bien,gracias a que renuncie "voluntariamente" ajjjj, a ese cargo, a ese destino, surgió la idea de la bodega y pude dedicarme a ello,y me ha salido francamente bien, ahora puedo mirar al jefecillo desde mi pequeño y modesto pedestal, ahora hago botellas de vino y menos hipotecas,mejoré con el cambio, y es que yo siempre he sido de armas tomar...¿Pero cuántas estarán en manos de sus jefes?, ¿Entre la espada y la pared?.